Ir al contenido principal

27/03/25



Tercera sesión:

En esta tercera sesión profundizamos en cómo atender a la diversidad real que habita hoy en las aulas. Toda esta diversidad del alumnado la he vivido personalmente en las practicas y considero que es una de las cuestiones clave de nuestra futura labor como docentes. Reflexionamos, también, sobre las múltiples necesidades del alumnado, necesidades lingüísticas, sociales, emocionales, cognitivas...

El caso práctico de Billy, un alumno extranjero, nos permitió analizar estas ideas. A través de su texto escrito analizamos su nivel de español y detectamos en parejas o pequeños grupos, algunas de sus principales dificultades, como por ejemplo, vocabulario, sintaxis, formación de oraciones, entre otras. Sin embargo, también nos dimos cuenta por su manera de escribir que su competencia oral era mucho más alta, lo que nos hizo pensar en las limitaciones del sistema educativo, que a menudo prioriza la evaluación escrita y no contempla suficientemente la riqueza de otros formatos.

Por lo que surgió un debate en clase sobre este caso. Nos hicimos preguntas como por ejemplo: ¿cómo podemos evaluar de forma más justa? ¿Qué sentido tiene exigir lo mismo a todos cuando no todos parten del mismo lugar? Consideramos propuestas como actividades multinivel, trabajo cooperativo, o un acompañamiento docente más humano y cercano, sin perder la distancia profesional.

Además, tratamos el hecho de cómo secuenciar y organizar los contenidos, y no considero que llegamos a una respuesta clara, pero es cierto que coincidimos en que, sea cual sea el enfoque, debe partir siempre del contexto del alumnado, de sus intereses y necesidades.

La sesión cerró con una reflexión sobre la vocación docente. Más allá de saber de lengua, ser profesor hoy implica saber observar, escuchar, adaptarse y tomar decisiones pedagógicas complejas. Enseñar no es solo transmitir contenidos, es crear las condiciones para que todos puedan aprender.

Comentarios

Entradas populares de este blog

21/05/25

Novena sesión: La sesión final consistió en la presentación de una situación de aprendizaje (el trabajo final de la asignatura) mediante el formato PechaKucha, que exige exponer nuestra propuesta didáctica en poco más de seis minutos, con veinte diapositivas de veinte segundos cada una. Para este formato es muy importante tener una planificación previa muy marcada y ser claro y conciso al hablar. Considero que este formato para exponer tiene sus cosas buenas y sus cosas malas. Por un lado, con este formato, te aseguras de que el alumnado va a realizar una presentación muy pensada y organizada, a la vez que te aseguras de que todos los grupos o parejas van a tener tiempo suficiente para exponer y escuchar la opinión pertinente del docente. Pero por otro lado, considero que para el alumnado que no esta acostumbrado o que no se le da bien hablar en público, este método es muy agobiante y sufrido, ya que a parte de ponerse nerviosos ya de por sí, están en tensión porque el tiempo ...

14/05/25

Octava sesión: En esta sesión trabajamos una forma distinta de programar a partir del Real Decreto 217/2022. En vez de partir de una temática previa, organizamos directamente los saberes básicos en situaciones de aprendizaje. Esta práctica me pareció bastante útil porque nos permitió asegurar que todos los contenidos estuvieran presentes de forma coherente, sin perder de vista el enfoque competencial. Además, reflexionamos sobre el papel del libro de texto en el aula. Aunque puede ser una herramienta valiosa, sobre todo en los primeros cursos, también vimos cómo puede convertirse en una limitación si se impone como obligatorio durante varios años. La autonomía docente que permite la ley queda bastante restringida. También se comentó la complejidad de diseñar materiales propios, que puedan llamar la atención del alumnado y despertar su motivación en las sesiones, a la vez que ser útil y seguir la normativa rigente. Algo que tengo muy claro es que es muy importante contar con materiale...

12/03/25

Segunda sesión: En la segunda clase de la asignatura se nos pidió leer en voz alta una carta de desamor escrita mano, y aunque pueda parecer sencillo, no lo es tanto ya que la diferencia entre esto y una exposición o lectura normal es que en esta carta habíamos expresado nuestros sentimientos y emociones y habíamos contado experiencias personales reales, en el caso de la mayoría de los compañeros.  El ejercicio, planteado con la intención de ponernos en una situación de tensión, sirvió para hacernos conscientes de cuánto comunica el cuerpo cuando hablamos. Cosas como la voz temblorosa, los movimientos nerviosos, las pausas involuntarias, etc..., pueden expresar igual o más que las palabras en según que ocasiones. Me parece fundamental darnos cuenta de todo esto, y tener consciencia real de lo importante que es el lenguaje no verbal al exponer algo. Además, no estábamos presentando una idea ajena o un trabajo ordinario de la asignatura, sino algo que nos incumbía directamente, lo ...